Si hasta cambié la resolución de pantalla para dejar de jugar y caí en un juego mucho más exitante, 15, 16 o 17, un nuevo cigarro justo tras el anterior me hace pensar que caigo nuevamente pero ésta vez sonrío ante aquel viejo infortunio, tenías ganas de esto repite mi mente mientras el corazón se acelera, ¿Pura química? o es la canción que después de tanto vuelve a sonar la que impulsa estas palabras, ya ni siquiera son de tinta son sólo pixeles y el segundo blog carece de significado pues ambos son las Memorias de un Yo desesperado y cada día parecen ser uno.
Here we go again y las viejas manías se manifiestan como si nunca hubiesen estado ausentes, a quién engaño, están más presentes que nunca y ya no tengo cabeza para esto, vagar esperando nada y encontrarlo todo, frase tan cotizada entre mis palabras que su sentido comienza a escapar a mi razón.
Adoro estos instantes que hoy son más breves que antes, en que mi vida se paraliza y la pausa invade las pantallas, los libros y todas mis actividades, esto de revivir y soñar es peligroso pero ahora puedo darme el pequeño lujo de volar.
Surge la pregunta de si esto será leído por los ojos a los cuales está destinados y si ellos lo identificarán como tal, medio cigarro más adelante y con el vaso medio lleno o si lo prefieres medio vacío todo parece volver a la normalidad.
Muy tarde, la memoria ya está atrapada entre sueños y melodías.
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